En los últimos años hemos crecido: aumentamos tanto en proyectos, como en el número de personas que componemos Rioja Acoge. Esto hace necesario mantener un aprendizaje continuo de herramientas y de repasar aspectos vitales para el trabajo que realizamos.
Ser coherentes es importante. Por ello, consideramos imprescindible la unidad en el discurso y la imagen que conforman nuestra cara visible, para que nuestro mensaje alcance y se asimile por los diferentes públicos a los que nos dirigimos.
Damos relevancia al lenguaje en pro de la igualdad de género. Y es por ello que hicimos un especial paréntesis durante la mañana, para intercambiar opiniones y definir orientaciones para su uso y adecuada aplicacción en el día a día.
En diversos ámbitos, se sigue utilizando de forma habitual el masculino como forma gramatical genérica, tanto en singular como en plural, para hacer referencia a hombres y a mujeres. Gramaticalmente es correcto, pero la expresión lingüística no es solo una cuestión gramatical, esta utilización del masculino como genérico tiene efectos negativos en la trasmisión de la cultura y sus valores, debido a que invisibiliza a las niñas y a las mujeres en el discurso y contribuye a su discriminación.
La lengua en sí misma no es sexista y dispone de diversos recursos para que el discurso tampoco lo sea, como nuestra recomendación de usar siempre palabras con un sentido más amplio y que engloben claramente ambos géneros: «persona» o «personas», en lugar de «hombres»; «infancia» en lugar de «niños»; son algunos ejemplos.
Las diecisite personas que estuvimos en esta actividad, concordamos en que fue una jornada imprescindible y que se debe retomar anualmente. Es un tipo de encuentro que permite trabajar en equipo, reflexionar, resolver dudas y en la que acordamos sencillas pautas, muy necesarias para generar información centrada en las personas, en los derechos y que aporte valor a la sociedad.