21 de marzo de 2022Desde Rioja Acoge, ante los últimos acontecimientos, queremos invitar a la reflexión sobre la puesta en marcha de medidas que garanticen y protejan los derechos de la población refugiada, sin discriminación contra ninguna persona y/o colectivo, en cualquier situación de desplazamiento forzado y su acogida en condiciones adecuadas, aplicando la protección inmediata y de carácter temporal para las personas desplazadas y facilitando vías seguras y corredores humanitarios en todas las situaciones de crisis y/o conflictos.
Hemos sido, somos y seremos un mundo con movilidad humana permanente. Aunque han existido conflictos anteriores, es la primera vez que el Consejo de la UE ha aplicado la Directiva 2001/55/CE del Consejo, sobre protección de personas desplazadas y que permitirá automáticamente a las personas de nacionalidad ucraniana que se han desplazado, a residir, trabajar o estudiar en la Unión Europea un año, prorrogable hasta tres años, sin tener que solicitar asilo.
Aplaudimos esta decisión, la verdad es que se trata de eso: de facilitar la vida a todas las personas que migran, que se desplazan, que necesitan asilo. En nuestro quehacer diario atendemos a personas que proceden de diferentes países que también se encuentran en situación de crisis humanitaria y/o conflicto. Por poner algunos ejemplos: Afganistán, Rep. Democrática del Congo, Colombia, Etiopía, Yemen, Somalia… Por ello, queremos instar a la Unión Europea y a las autoridades españolas a facilitar una protección adecuada a todas las personas desplazadas y/o refugiadas. Recordamos que 96 de cada 100 personas que solicitan asilo en nuestro país, ven rechazada su petición, con todos los efectos negativos que ello conlleva.
Queremos agradecer las muestras de solidaridad de la sociedad riojana. Hemos recibido numerosas llamadas, visitas de personas a nuestra sede, que ofrecen viviendas, acogimiento de menores, medios de transporte para evacuar, entre otras.
Animamos a utilizar los cauces oficiales para que se pueda realizar una respuesta coordinada y efectiva e invitamos a reflexionar sobre esta acogida. Todas las personas que llegan a nuestra región huyendo de conflictos precisan de una red de apoyo y de un acompañamiento que facilite su proceso de integración y de autonomía.
